jueves, 25 de junio de 2009

Liderazgo

He estado otra vez de vacaciones, no como en el post anterior que iba de invitado, sino de vacaciones anuales con la familia. Son cosas distintas. Si vas de invitado, al final tienes que acabar cediendo en algo y adaptándote a costumbres que igual las respetas y tal pero que en el fondo piensas que son chorradas. Si vas de vacaciones anuales familiares sin embargo, es la voluntad de uno la que decide lo que se va a hacer en cada momento, en mi caso lo hago ejerciendo un marcado liderazgo vacacional, un periodo de absoluto machoalfismo familiar en el que mi persona es venerada y mi culo consultado hasta para el detalle más nimio. Normalmente recostado en la postura más cómoda, desarrollo un comportamiento en el que exijo una respuesta inmediata a mis órdenes, son los demás los que se deben plegar a mis designios y hacer los esfuerzos que sean necesarios a fin de garantizar mi comodidad y el aseguramiento de mis diez horitas de sueño, más dos de siesta.

*****

[Dia 1, 23:57, hora en la que el enano debería estar dormido hace tiempo]

--a ver qué pasa aqui, ¿no puedes dejar de dar volteretas de una [puta] vez y dormirte ya?
--no puedo padre, me resulta imposible refrenar mis instintos volatineros
--venga hombre, ponte a caballito con la almohada y a hacer lolitos
--ya lo he intentado y es inútil, es la novedad, estoy eufórico y...
--venga, tápate y a hacer lolines con el pico cerrado o mañana no hay piscina
--no, eso no por favor
--a dormir entonces
--es que, es que estoy muy contento y un poco desubicado, no sé si es esta enorme cama o este habitáculo desconocido para mi, me resulta muy dificil conciliar el sueño pensando en las maravillas que nos esperan mañana y no puedo evitar explorar cada rincón de este enorme tálamo emitiendo grititos de alegría y...
--a dormir o mañana no hay pisci, insisto, y es mi última palabra
--jeje padre, sé que no eres tan cruel y que tu pretendida firmeza conmigo es de boquilla, una pose, un fingido aire autoritario a fin de que me quede sobao y podáis proceder a la visualización de algún capítulo de Perdidos, quinta temporada
--...
--padre, no intentes convencerme porque no es algo en lo que intervenga la voluntad, simplemente no puedo dormir, ya cerraré los ojos cuando la naturaleza lo disponga
--¿vas a estar calladito entonces e intentar dormir?
--sí, intentaré dormir, pero necesito expresar mi alegría emitiendo fonemas varios
--[joder...] bueno, intenta por lo menos estarte quietecito, cesa en tu actividad volatinera y controla la emisión de sonidos hasta un volumen aceptable
--sí, lo intentaré pero es curioso, es decirlo y el dedo anular se me cruza y se me pone encima del índice y...
--¿quieres que venga tu madre a ponerte al orden?
--no, madre no, prefiero que tú te ocupes personalmente porque...
--ya, para vacilarme a saco [cual enano cabrón], ¿vas a dormirte ya?, ¿quieres que llame a tu madre?
--sí, sí, ya me duermo
--a ver si es verdad

***

[Día 2, 17:45, hora de ir a la piscina aprovechando la coyuntura solar]

--buaaaaaa
--venga hombre, que hay que ponerse los manguitos para ir a la piscina
--nooo, no quiero, qué pensarán las nenas de mi con este aspecto tan ridículo...
--tienes que ponértelos, cuando tengas tres años ya podrás ir sin manguitos pero ahora, no
--buaaaaaaaaaaa, bu, bu, buu, buaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa
--venga ya está, vamos a la pisci, vas a ver qué bien
--bueno, cedo, pero muy a mi pesar, vamos padre, ¡a la carrera!
--no coorras, despaciiito...
[plaff]
--buaaaaaaa, buaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa
--¿ves?, ya te has caído
--padre, buaaaaaa, padre, ¿qué es esta extraña sensación que recorre mi sistema nervioso?
--...no me digas que no conocías la pupita
--¿pupita?, ya me había caído antes y nunca he sentido la pupita esa que dices
--claro, pero este camino tiene piedrecillas y te has hecho pupita en la rodilla
--¿en la rodilla?...es verdad...buaaaaaaaaaa... ¿y qué es esa sustancia roja que emana de ella?, buaaaaaaa, ¿por qué se me ha quedado la piel hecha jirones?, ¿recuperará algún día su aspecto normal o será preciso pasar por quirófano?, buaaaaaaaa, buua
--nada hombre, estás sangrando un poco, vamos a casa y te pongo mercromina y una tirita
--no, yo quiero ir a la piscina, soportaré la pupita estoicamente si es preciso
--ya conozco yo tu estoicismo, venga, a poner mercromina
--¿y no vale con unos mimos?, cuando me caigo, madre me hace unos mimos y...
--no, te has despellejado la rodilla, a poner mercromina he dicho
--buaaaaaaa, yo quiero ir a la piscinaaaaaaa
--a ver escúchame, digo yo que sabrás ya de la existencia de un pez llamado piranha, es un pez con dientes como cuchillas y capaz de olfatear la sangre en el agua a miles de kilómetros de distancia, su instinto hace que ataquen en manada y actúan como un rapidísimo y eficaz depredador, entiéndeme, no estoy diciendo que las piranhas te vayan a comer si no vamos a casa y te pongo mercromina en la rodillita, de tu seguridad física me ocupo yo personalmente y con eso está todo dicho, pero la voracidad de esta especie, su querencia por los niños que se han hecho pupita y sangran un poquito, hace que atraviesen todos los océanos y vengan todas a esta piscina, tantas, que tendré que estar luchando con ellas todo el rato para que tú puedas bañarte tranquilo, estaré tan ocupado que no podré jugar contigo, ni a tirar la pelota y donde caiga, ni a practicar conmigo cómo hacer una buena aguadilla
--creo que es el mayor dilema moral que he visto en mi vida...
--seguro
--¿qué debo hacer, padre?, por una parte mi clara vocación piscinal, y por otra, la ausencia de la figura paterna en dicho frenesí acuático debido a su lucha con esos feroces peces...ya voy viendo que todo en este mundo entra de lleno en el campo de lo cuántico y que cada decision que tomamos tiene a una persona baturra detrás...
--...me siento muy horgulloso ahora mismo...
--ayúdame a decidir padre, ¿qué debo hacer?
--venga, vamos a poner mercromina y después a la pisci
--¡bieen!
--...
--vamos padre, ¡a la carrera!

martes, 9 de junio de 2009

En un país maravilloso

Lamento no haber publicado ningún post asnal pero es que he estado quince días en China. Unos ciudadanos chinos se pusieron en contacto conmigo y me dijeron que a ver si yo tenía algún resquemor en contra de su gran país, que en mi blog daba una imagen de ellos harto alejada de la realidad y les mostraba como personas malvadas y carentes de escrúpulos, que si sus antepasados vieran lo que este blog hace con su honor, saldrían inmediatamente a lomos de sus serpientes voladoras y crearían un caos mundial como jamás se ha conocido. Yo, bueno, al principio flipé, lo reconozco, pero ya después les dije que no, que qué va, que al contrario, que hay muchos chinos feos pero que también tienen a las chinitas, que visitar un establecimiento chino es conocer otra cultura, y que no tengo ninguna declaración más que hacer. Aqui ya los que fliparon un poco fueron ellos creo yo, volvieron a insistir con lo del resquemor y le añadieron que yo tenía que publicar un post aclaratorio pidiendo perdón por mis anteriores difamaciones, so pena de verme envuelto en un interminable proceso judicial, acusado de horribles delitos y sin posibilidad de defensa ante lo abrumador de las pruebas en mi contra. Este fue el momento exacto en el que se me hincharon los cojones.

A ver, le dije al chino jefe, ¿tú sabes bien quien soy yo?, ¿tú sabes lo que yo he hecho por el Tao?, dándolo a conocer, creando cantera, construyendo con mis propias manos una amplia base sólida y postal, y ahora... mira chino, ve en paz por favor, namasté para ti y tus amiguitos armados y malencarados, estoy harto de luchar, harto de tanta sangre y de tanto horror, de no saber si es de día o es de noche, para que venga un tío a decirme que he hecho no sé qué y que como no haga algo que él dice, me cae un marrón del que no me voy a poder librar... mi paciencia tiene un límite pero hago un claro llamamiento a la paz, que las armas automáticas que lleváis debajo de esas chupas chinas tan guapas no os den una falsa sensación de seguridad, lleváis las de perder en esta batalla, es que ya estoy recreando mentalmente la escena y os aseguro que la paliza puede ser de impresión. Seguí asi un buen rato, tirándome el moco ante ocho chinos armados, hasta que el jefe chino llamó por el móvil y entonces fue cuando me invitaron quince días a China a todo lujo: he comido con el presidente Hu Jintao, he aprendido mandarín y cantonés, he sido jurado en el concurso de tangas de Shangai, 750 millones de personas se rieron a la vez por un chiste que conté por la tele, hice el maratón del desierto del Gobi, he comido deliciosas brochetas de serpiente asada recién despellejada, fui el invitado de honor en la inauguración del Victoria's Secret de Beijing, y me he hecho colega de los dueños de las principales webs de venta de artículos de todo tipo a precios irrisorios. China es un grandísimo país, inmenso, lleno de contrastes y petao de chinos por todas partes, sus olores, sus sensaciones, esa luz, ese ambiente, esa gente amabilísima que se desvive por hacer tu estancia más agradable... es que todo es cojonudo en China, es un país que os recomiendo vivamente.

Etiquetas: